Control remoto: pequeño pero necesario
El mundo de la electrónica no sería posible de no ser por los minerales que llegan a la industria. Gracias a ellos, utilizamos en nuestra vida cotidiana todo tipo de dispositivos inteligentes, entre ellos, el control remoto.
Aunque suele pensarse del control remoto como un simple dispositivo hogareño para prender y apagar la televisión, este pequeño objeto popularizado en los años 50 ha repercutido en muchos rubros.
En la actualidad suele haber más de un control remoto en las casas, ya que, además de la televisión, se utilizan para controlar aires acondicionados, equipos de música, videojuegos, reproductores de DVD, alarmas, portones de garaje, etc. Incluso los hogares inteligentes, también conocido como tecnología domótica, se valen de controles remotos para automatizar la gestión energética, seguridad, bienestar y comunicación de los espacios.
En la industria el control remoto ha mejorado el proceso al utilizar controles remotos para operar subestaciones, centrales hidroeléctricas reversibles y plantas HVDC.
En cuanto a aplicaciones militares, El uso control remoto de vehículos militares data de comienzos del siglo XX. El Ejército rojo usaba teletanques, controlados remotamente, durante los años 1930 y los comienzos de la Segunda Guerra Mundial. También experimentaron con aviones por control remoto.
Por último, en la astronáutica, la tecnología por control remoto también es usada en los viajes al espacio. Por ejemplo, en el programa Ruso Lunokhod, los vehículos eran accionados por control remoto.
El acero es uno de los materiales primordiales para construir controles remotos, y este se obtiene gracias a la minería desarrollada bajo claras normas mundiales y con respeto por el entorno.