Filtros para el agua: más seguros con recubrimiento de cobre
Los filtros de agua habitualmente se fabrican en cerámica porosa recubierta con plata coloidal.
La plata coloidal es una sustancia de uso medicinal producida con átomos de ese metal y proteínas.
Esa sustancia impide el crecimiento de las bacterias que quedan atrapadas en aquellos minúsculos poros.
También el cobre y el zinc han demostrado su poder antibacterial.
Recientemente, investigadores de la Princeton University, de Nueva Jersey, estudiaron con un microscopio atómico las interacciones entre la bacteria Escherichia coli y nanopartículas –partículas muy pequeñas– de plata coloidal, plata y cobre, así como entre aquella partícula y las superficies realizadas en los tres metales y aplicadas a filtros cerámicos.
Tal como se publicó en el Journal of Applied Physics, la superficie que posee mayor afinidad con la Escherichia coli es la plata coloidal y, por lo tanto, tiene un alto poder de retención de la bacteria.
Sin embargo, ya que la plata coloidal y el cobre demostraron el mismo nivel de afinidad con la batería, se considera que el cobre, por su bajo costo, posee un marcado potencial para ser utilizado de manera masiva en el recubrimiento de los filtros.
Fuente: “Scientists evaluate different antimicrobial metals for use in water filters”.