La llave inglesa, una versátil herramienta de hierro
No importa la edad o el sexo, cada vez es más normal contar con una caja de herramientas básicas en el hogar para salir de apuros. Entre ellas, la llave inglesa es una de las más populares.
Esta herramienta manual tiene como objetivo ajustar y aflojar tuercas y tornillos de diferentes tamaños y diámetros. Su ventaja radica en su cabezal regulable.
Aunque el origen de la llave inglesa es un tanto borroso, no hay dudas que los primeros modelos fueron desarrollados por el ingeniero inglés Edwin Beard Budding. Aun asÃ, el sueco Johan Petter Johansson, un herrero de la ciudad de Enköping, fue el primero en patentar el caracterÃstico tornillo de ajuste de la herramienta en el año 1892. Debido a su oficio, se veÃa obligado a llevar consigo un gran número de llaves fijas, pesadas y voluminosas y por ello habrÃa inventado esta herramienta para sustituirlas por una sola.
Al igual que los destornilladores y martillos, la llave inglesa debe ser extremadamente fuerte y resistente. Por eso mismo, para fabricar esta herramienta se necesita de acero de gran calidad y dureza.
Este material no estarÃa disponible de no ser por la actividad minera responsable con el medio medioambiente y en consonancia con las normas internacionales.